La cascada artificial de Lomo Morín, en Los Silos, sigue siendo un reclamo para numerosas personas que acuden desde cualquier parte de la isla y de otros lugares atraídos por la espectacularidad de las fotos que abundan en las redes sociales.

Pese a los intentos del Ayuntamiento de Los Silos, de la comunidad de regantes y de los propietarios de las fincas colindantes por evitar el paso a un lugar privado, atajar la llegada de cientos de personas a la semana se antoja muy difícil, máxime cuando cada vez las indicaciones para encontrar la cascada son más visibles.

El pasado lunes aparecieron unas pintadas con spray en el acceso a Lomo Morín a través del canal, justo al lado de donde se sitúan las vallas para impedir el paso. En el muro, una gran flecha indicando la dirección a tomar. Debajo, en un antiguo trozo de hormigón del canal, las palabras «Lomo Morín», en mayúscula y como señal inequívoca de que quienes deseen hacer caso omiso a las indicaciones de las autoridades deben ir por ahí.

El aviso lo dieron desde Nivariaextremo, la empresa de turismo activo que opera desde hace varios años en Lomo Morín en actividades de barranquismo y que ya el año pasado, tras el desconfinamiento, grabó en vídeo con toda la basura que se había acumulado en las inmediaciones de la cascada tras un fin de semana de bastante afluencia. Su responsable, Santiago Florido, asegura que esas pintadas tuvieron que haberse realizado el domingo 18 de abril, ya que el sábado aún no estaban.

En el verano de 2020 se instaló una reja en el canal para impedir el paso, además de una señal prohibiendo el tránsito de vehículos no residentes por el camino de La Isleta. Sin embargo, las decenas de personas que suben cada fin de semana esquivan los avisos y las vallas y consiguen llegar a los pies de la cascada, pese a que el acceso por un terreno escarpado y lleno de fango no es nada fácil.

Codirector de DAUTE DIGITAL y redactor en COPE Canarias. Grado en Periodismo por la Universidad de La Laguna y Máster en Innovación en Periodismo por la Universidad Miguel Hernández de Elche.