Antonio González no oculta su malestar y frustración por cómo se está trasladando a la opinión pública la campaña de erradicación de las cabras asilvestradas en Anaga y Teno. El alcalde y el Ayuntamiento de Buenavista están recibiendo el apoyo de numerosos colectivos ecologistas, ganaderos y vecinos, pero también duras críticas por parte de animalistas y ciudadanos en general.

Gran parte de ese malestar va dirigido al Cabildo de Tenerife, la administración encargada de llevar a cabo el plan contra unos animales que están acabando con parte de la rica biodiversidad del macizo de Teno y con los cultivos de agricultores de la zona. La consejera insular de Medio Natural, Isabel García, ha anunciado la paralización de las batidas de cabras y la vuelta a las apañadas, pero desde el Ayuntamiento habían sido notificados de que la matanza se reanudaría el próximo 11 de noviembre.

«Hablamos con la consejera y le solicitamos una reunión e, incluso, hacer una prórroga si los cabreros lo pedían, pero no nos ha gustado que no cuenten con nosotros para tomar esa decisión cuando hemos estado dando la cara en los medios», asegura González en declaraciones a DAUTE DIGITAL. El alcalde espera que ese aplazamiento «no sea por presiones populares», ya que se trata de un plan iniciado a principios de 2018 pero que está sobre la mesa desde 2013.

El alcalde buenavistero insiste en la «falta de información» que ha acompañado todo este proceso. «Al Cabildo le ha faltado salir a defender lo que se está haciendo. No es un capricho, sino una cosa bien hecha, tramitada con mucho tiempo de forma correcta y donde se ha intentado apañar todas las cabras posibles», manifiesta. «Hay que explicar por qué hay determinados ejemplares que no se han podido apañar y qué pasa cuando se cogen, porque parece que se vuelven a integrar en los rebaños y no es así».

Al Cabildo le ha faltado salir a defender lo que se está haciendo

El bando publicado por el Ayuntamiento en 2018 daba dos meses de plazo a los ganaderos para recoger las cabras asilvestradas. De lo contrario, se haría cargo el Cabildo de las apañadas y, en último momento, de las batidas. La noticia estaba en los medios desde entonces pero la polémica ha saltado ahora. «Se ha dado más tiempo de lo que se dijo y esa es una de las cosas que se han hecho mal, era mejor no fijar plazos».

Salto del pastor en Teno / Imágenes de archivo
Apañadas inútiles

Disparar a la fauna silvestre no es un capricho. «Estamos hablando de apañar animales en lugares completamente inaccesibles. Da la sensación de que se están matando animales por gusto y no es así», subraya Antonio González, quien recuerda que los vecinos del caserío de Los Carrizales le han comunicado al Ayuntamiento que ha habido «apañadas inútiles».

La última batida se produjo en Masca el pasado lunes. Fue necesaria la intervención de la Policía Local y del Seprona a petición de un agente de Medio Ambiente del Parque Rural por la actitud agresiva de una persona. En esta primera fase se ha actuado en el barranco de Masca, Abache, La Fortaleza y en algunas zonas de los acantilados de Los Gigantes. «En Taburco hay ganado guanil —aquel que se cría suelto— y no se han planteado batidas porque se pueden hacer las apañadas», apunta el alcalde.

Un debate «científico puro y duro»

Cientos de expertos y 16 colectivos ecologistas han alertado de los «daños irreversibles» que provocan las cabras asilvestradas en la biodiversidad de Teno y Anaga. A Antonio González le molestan los comentarios ajenos a esos sectores que se hacen sin fundamentación y pide realizar «un debate científico y técnico puro y duro». «Son cabras descontroladas, que pasan de ser 20 a 80 en un año y que ya no tienen nada que ver con las que pudieron perder los pastores en su momento», apunta.

González también precisa que, pese a apañarlas, la mayoría de cabras no pasan los controles sanitarios y acaban muriendo porque no pueden ser reintegradas en el ganado ni en la cadena alimentaria. Por ello, pese a las críticas, el Ayuntamiento de Buenavista sigue defendiendo un trabajo «bien hecho» y exige al Cabildo que explique las «garantías técnicas» de las batidas, previstas para las próximas semanas. El fin último es proteger la riqueza autóctona de Teno y la actividad agraria del macizo.

Codirector de DAUTE DIGITAL y redactor en COPE Canarias. Grado en Periodismo por la Universidad de La Laguna y Máster en Innovación en Periodismo por la Universidad Miguel Hernández de Elche.

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