«En esos momentos no se te pasa nada por la cabeza. Solo pensé en salvar la niña». Este es el único pensamiento que tuvo Antonio Beltrán, agente de la Guardia Civil y de Buenavista del Norte, cuando rescató a una menor que pedía auxilio en la piscina natural del antiguo pescante de Hermigua, en La Gomera, el pasado domingo 13 de marzo.
La niña de 9 años logró salvar su vida gracias a la intervención de Beltrán. «No paraba de pensar en que era una persona muy joven y que apenas había disfrutado de la vida», asegura Beltrán a DAUTE DIGITAL. Desgraciadamente, el padre de la menor falleció.
El agente buenavistero de la Guardia Civil se tiró al agua en medio de fuertes corrientes y logró rescatar a la niña con vida. La menor se encuentra en perfecto estado y Beltrán ya ha podido visitarla. «Me puse en contacto con su madre y me acerqué al hospital. La madre me agradeció muchísimo que le salvara la vida a su hija, con la que tiene una conexión muy especial. Fue un momento muy emotivo», afirma.
Hermigua es el primer destino profesión de Beltrán. «Ingresé en la Guardia Civil hace dos años y medio y la verdad es que uno no piensa nunca en que pueda arriesgar así su vida«, explica. Además, el agente destaca que cuando se estaba preparando para Guardia Civil «era consciente del tipo de trabajo que desempeñaría. Está claro que en algún momento se te puede presentar una ocasión así por muy tranquilo que estés en tu día a día», añade.
Antonio Beltrán no tiene ningún tipo de preparación física en el medio acuático, pero eso no fue un impedimento para acudir al rescate. «La verdad es que al ser de Canarias, quieras o no, estás acostumbrado al mar. Pero no tengo entrenamiento habitual en el agua», describe. No obstante, Beltrán lleva muchos años con entrenamientos de gimnasio, practica el baloncesto y sale a menudo a correr y en bicicleta. «Si el que yo haga deporte ayuda a solucionar este tipo de situaciones, mejor que mejor», concluye.