El alcalde de Buenavista del Norte, Antonio González, ha reconocido que el barranco de Masca no reabrirá durante el mes de agosto, en vista de los detalles que faltan por ultimar. Días atrás, la consejera de Medio Natural del Cabildo de Tenerife, Isabel García, había especulado con finales de agosto o inicios de septiembre como fecha.
En una entrevista en COPE Tenerife, González ha explicado que, aunque «la obra del barranco está terminada, siempre hay cuestiones que faltan como la obtención de los permisos para operar con todas las garantías de seguridad».
En este sentido, ha señalado que, aunque la apertura estaba prevista para el verano, «estamos entrando ya en el mes de agosto y todavía estamos inmersos en la obtención de los permisos para llevar a cabo los trabajos de culminación». Por eso, la estimación del Ayuntamiento es que esos «trabajos e informes» no llegarán a tiempo «para que el barranco esté abierto durante el mes de agosto».
A juicio del alcalde, aunque el barranco se cerró en 2018 por cuestiones de seguridad, «desde la oposición se percibía que no se tenía muy claro cómo se iban a realizar las intervenciones necesarias para que la regulación se pudiera poner en marcha».
Para González, «había un planteamiento general que todos podíamos tener claro como el modelo o cuántas personas iban a entrar», pero a continuación comenzaron a aparecer diferentes cuestiones, «un trabajo más menudo después de tantos años de libre albedrío». «Tengo la sensación de que hay muchísimas cosas pequeñas que se han ido posponiendo, que no tienen que ver con el planteamiento general del barranco y que han impedido la puesta en marcha del servicio», ha señalado.
A todo eso se suma el «el cambio de gobierno en el Cabildo —aunque el Área de Medio Ambiente ha seguido en manos del PSOE— y en el Ayuntamiento», y un retraso en trámites como la ampliación del embarcadero de la playa, acusando al anterior equipo municipal socialista de no haber empezado a trabajar en la obtención del permiso de Costas.
Antonio González ha reconocido que el cierre del barranco y el retraso de su reapertura «es un desastre para las empresas que tenían enfocada su inversión» en el lugar, y ha deseado que las obras terminen lo antes posible.