La alta densidad de tráfico de la pista agrícola que conecta Barrio Nuevo con San José de Los Llanos sigue generando problemas en El Tanque, en una vía que por sus propias condiciones fue ideada solo para el acceso a las fincas de la zona. Ante esto, el Ayuntamiento ha decidido restringir la circulación, siendo apta solo para los residentes en el municipio y para los propietarios o trabajadores de las fincas que se encuentren en la pista.

La vía sirve de atajo en el trayecto hacia el sur de la isla, esquivando así las numerosas curvas de la carreteras TF-82. A esto se le añade, según el alcalde, Román Martín, las recomendaciones de itinerarios por GPS, sobre todo, en los vehículos de alquiler. Unido a la apertura de los tramos del anillo insular, ha provocado «una densa carga de circulación que la vía no puede soportar debido a su naturaleza agrícola».

El consistorio, recuerda Martín, ha impulsado diversas iniciativas como la señalización vial, la instalación de la señalización con limitación de velocidad, la ejecución de pasos elevados o los controles policiales de circulación, «sin embargo, la vía sigue presentando un alto nivel de inseguridad». Estas medidas no han sido del todo disuasorias, obligando al Ayuntamiento a ir un paso más allá para cerrar el paso a las personas ajenas al municipio.

Instalación de guardias muertos en la pista

Durante los próximos días, los agentes de la Policía Local llevarán a cabo un punto informativo en los accesos desde Barrio Nuevo y San José de Los Llanos «para informar al conjunto de usuarios y para mejorar la seguridad de los vecinos y conductores que diariamente circulan» por esa pista.

El año pasado, Ciudadanos pidió ensanchar la calzada para reducir la peligrosidad, argumentando que los límites de velocidad no eran suficientes. «No hay excusas para ensanchar la carretera, ya que hay espacio suficiente para ello», por lo que «solo hace falta voluntad política para ejecutar esta obra, y hacer de esta carretera una vía segura», tanto para los conductores, como para los peatones que circulan por ella, dijo la coordinadora local, Candelaria Ruiz. No ha sido esa la solución adoptada.

Codirector de DAUTE DIGITAL y redactor en COPE Canarias. Grado en Periodismo por la Universidad de La Laguna y Máster en Innovación en Periodismo por la Universidad Miguel Hernández de Elche.

1 comentario

  1. Claro, nos tienen años circulando por curvas y curvas detrás de gente que literalmente está paseando, y cuando un pedacito de carretera nos facilita la vida nos lo cierran por peligroso, por que molesta a los vecinos o porque pasa cerca de la casa de alguien al que no le interesa. Y la culpa de todo ésto es la pésima organización para terminar de una vez el anillo insular, el de verdad, una carretera buena (relativamente, porque ya tiene en ocasiones menos carriles de los que debería).
    Y nada, a todo el que use la carretera para trabajar, no hay otra que ir detrás de todo el mundo y salir antes de casa, todo porque nadie quiere terminar lo que se empezó hace años y años y que ya debería estar en funcionamiento (O al menos construída).