«¿Cuándo van a abrir la carretera?». Es la pregunta más sonada durante la jornada de este miércoles 2 de enero. Han pasado casi 48 horas -cuando se escribe esta noticia- desde que un derrumbe cortara la principal vía de acceso a la Isla Baja. De momento, la incertidumbre sigue reinando en cuanto a cuándo se reabrirá al tráfico.

Este diario visitaba la zona del derrumbe entre las 11.30 y las 14.00 horas de este miércoles 2 de enero y pudo comprobar que los operarios continúan quitando las piedras que podrían caerse a la carretera. Algunas de ellas de grandes dimensiones. El trabajo no está resultando una tarea fácil pero para la ciudadanía apremia poder pasar por esta carretera.

Cuando se escribe esta noticia -en torno a las 16.00 horas del miércoles 2 de enero- el director insular de Movilidad del Cabildo Insular de Tenerife, Miguel Becerra, visita el lugar del derrumbe.

Todo apunta a que la vía no se abrirá este miércoles 2 de enero. El Cabildo aseguraba en nota de prensa que «la vía se volverá a abrir al tráfico en cuanto sea posible y siempre que se puedan garantizar las condiciones de seguridad para las personas que transitan por ella».

Asimismo, Miguel Becerra dijo que «desde el Cabildo somos conscientes de que se trata de una vía muy demandada por los ciudadanos que residen, sobre todo, en la Isla Baja. Por ello trabajamos con la mayor celeridad posible para que pueda estar operativa en el menor tiempo».

El desvío del tráfico por la TF-82 está creando problemas de circulación al llegar a la TF-421 para desviarse a Garachico. Los vehículos pesados no pueden transitar por esa vía por lo que algunos suministros, después de los días festivos, no están llegando a la comarca. De igual modo, ocurre con la carretera que lleva hasta Los Silos por la Tierra del Trigo, de poca accesibilidad.

Las ambulancias sí que están circulando por la carretera cuando es necesario. Mientras se visitaba el lugar de los hechos circularon un par de vehículos de emergencia con el permiso previo de los operarios.

¿Y las guaguas?

Los problemas también se manifestaron en el servicio de guaguas dejando aislados, en un inicio, a los vecinos y vecinas del barrio garachiquense de El Guincho. Durante la jornada del miércoles 2 de enero, varias guaguas de menor tamaño van hasta este núcleo de Garachico para transportar a todos los usuarios de la Isla Baja hasta Icod por El Tanque. Este último municipio ha visto alterada su rutina diaria por el trasiego de tráfico.

En este sentido, para controlar algo el tráfico, hay dispositivos de la Guardia Civil y de la Policía Local de Garachico. El alcalde de la Villa y Puerto, Heriberto González, lo comunicaba en su perfil de Facebook agradeciendo la cooperación de la subdelegación del Gobierno de España.

Un sismo, una causa posible

Después del derrumbe, la sombra de un sismo rondó como la principal causa. Según la información publicada, el movimiento fue unos minutos antes de las 18.00 horas del 31 de diciembre y el derrumbe algunos minutos después de la misma hora.

El Instituto Geográfico Nacional (IGN) ha registrado el movimiento dando más fuerza a la hipótesis de que el derrumbe pudo ser provocado por el mismo. No obstante, no puede confirmarse al cien por cien esta información por este periódico aunque aficionados a la vulcanología se ponían en contacto con DAUTE DIGITAL para advertir del seísmo.

Si se consulta el IGN se puede comprobar cómo en los últimos treinta días de 2018 han ocurrido decenas de movimientos parecidos como el que se registró el 31 de diciembre.

Licenciada en Periodismo por la Universidad de Sevilla. Más de una década al servicio de la comunicación