Cuesta llegar. El camino no es fácil para llegar al paraíso aunque a Adán y Eva les bastó un solo mordisco de la manzana prohibida. El Edén es irrepetible pero Buenavista del Norte tiene el privilegio de ostentar varios: punta de Teno, el barranco de Masca, Teno Alto, el valle de El Palmar, Los Carrizales… a cualquiera se le puede ocurrir un rincón del municipio del que destacar su valor natural.

Buenavista tiene más privilegios: uno de sus paraísos terrenales es de lo más visitado en Tenerife. La cara b de esta moneda se resume en desorden, masificación, rescates e incluso muerte. La falta de regulación en este caserío ha provocado situaciones que se escapan del contexto de un paraíso, donde remansa la paz y la armonía.

Foto: Infotur Tenerife

Caminar por sus calles empedradas hace que detengas la mirada. Y en esos instantes, alzar la vista hacia el barranco es un verdadero truco de magia. La vista se pierde y busca detalles: nispereros, abejas polinizando, gatos ronroneando (de placer o dolor), los fulgurantes rayos del sol penetrando por el perfil de las montañas, mujeres longevas de allí que a pesar de los años siguen adivinando las piedras que pisar y muchos turistas (de muchas nacionalidades) que divagan por el lugar alucinando porque pensaban que el paraíso no existía. Y lo han encontrado, en Buenavista.

En medio de todo esto, la entrada del barranco sigue vallada. Se puede hacer un símil: el caserío es el Edén y el barranco, en sus profundidades, es el camino hacia las Hades. Donde hay gente que debe ser rescatada, se hieren y mueren. A pesar de las advertencias, siguen queriendo pasar hacia el infierno no regulado.

«Por primera vez se ha tomado la decisión de cerrar el barranco»

Se ha tomado la decisión de cerrarlo y no abrirlo hasta que no esté regulado. Eva García, alcaldesa del municipio, dice a DAUTE DIGITAL: «por primera vez, el Ayuntamiento de Buenavista, esta alcaldesa, ha tomado la decisión de cerrar ese barranco y por supuesto se va a abrir con las máximas garantías de seguridad». No duda antes las especulaciones que dicen que se abrirá antes de la regulación por la presión de las empresas que operan en el barranco.

El barranco de Masca es el más visitado de Tenerife
El barranco de Masca es el más visitado de Tenerife

«Si se pudiera poner en marcha con todas las medidas de seguridad antes de la regulación, se hará intentando ya tomar medidas para que esa regulación sea lo más efectiva posible», aclara García y continúa apelando a la prudencia de «hacer declaraciones respecto a hipotéticas medidas que para nada han sido planteadas por esta administración ni por el Área de Medio Ambiente del Cabildo».

Nacen las incertidumbres y la gente especula

Nacen las incertidumbres y la gente especula. ¿Abrirán el barranco de Masca sin regulación por las presiones de las empresas que operan allí? Estas preguntas se podrán realizar el próximo miércoles 4 de abril en una reunión que tendrá lugar entre la asociación de vecinos del caserío de Masca y la alcaldesa de Buenavista, Eva García.

Mientras tanto, los vecinos y vecinas de Masca siguen vendiendo sus nísperos. A dos euros, en una pequeña bolsa de plástico y a escasos metros de donde los recogen. Cada turista que pasa por allí compra ese manjar que seguramente no sepan pronunciar. La vecina que vende el fruto del paraíso cuenta que todos los días hay gente que intenta pasar al barranco.

Saltar las vallas por encima de las casas ha sido algo habitual. La gente no acata las restricciones y la Policía Local, agentes de Medio Ambiente y la Guardia Civil deben tomar las medidas necesarias para que no se adentren en las profundidades del Edén más visitado. Un paraíso que se ha convertido en un infierno a pesar de que sus puertas están cerradas.

No obstante, no hay nada que pueda alterar la paz de un lugar como Masca. No habrá mordidas a nísperos prohibidos, ni expulsados de un paraíso terrenal. Se espera el inicio de la regulación, el principio del fin del desorden para el caserío de Masca. Se espera que se haga en condiciones, sin presiones e intereses económicos. Porque el paraíso nunca ha entendido de dinero.

Licenciada en Periodismo por la Universidad de Sevilla. Más de una década al servicio de la comunicación