Unos agentes del Área de Medio Ambiente del Cabildo de Tenerife localizaron en la mañana del 1 de enero a una perra perdicera de caza de unos seis meses de edad que, según ha señalado el Cuerpo de Agentes de Medio Ambiente de Canarias, se encontraba «extraviada y en un estado de salud preocupante».
Los trabajadores intentaron sin éxito identificar al animal y buscar a su propietario en el entorno. La perra no portaba el obligatorio chip de identificación animal y se encontraba «hambrienta y muy asustada; no paraba de templar y no se resistió en ningún momento a la ayuda», relatan.
Ama, como así la han bautizado provisionalmente los agentes, fue trasladada a la Oficina de Gestión del Parque Rural, localizada en El Palmar.
«Una vez atendido el animal, se ha procedido a realizar las pertinentes diligencias de investigación, por si pudiese localizarse al propietario», explican los agentes. Este martes, 2 de enero, la perra fue trasladada con la colaboración de la Policía Local al refugio municipal, donde se está recuperando.
Desde el Cuerpo de Agentes de Medio Ambiente de Canarias recuerdan que la identificación de los animales domésticos es obligatoria y que el abandono voluntario puede constituir un delito de maltrato animal, tipificado en el Código Penal.