Buenavista del Norte acoge una nueva edición del campo de trabajo Intervención Comunitaria Intergeneracional, en la que contaran con la participación de 25 jóvenes que llegan desde diferentes puntos de España. Ha dado comienzo el día 6 de agosto para finalizar el 20 de este mismo mes.
Para esta edición han querido darle otro enfoque al proyecto, apostando por abordar una nueva modalidad de intervención comunitaria. Todo esto, con el objetivo de facilitar la participación activa y la colaboración entre los participantes y la población local.
Ángeles González, concejala de Juventud, asegura que «somos un municipio que mantiene un tejido asociativo vivo e importante, que muchas veces significa un verdadero motor de la actividad cultural, social y deportiva. Lo que pretendemos con la ejecución de este campo de trabajo es poner en valor esa dinámica participativa y promover la interrelación entre generaciones».
La elaboración de una ruta etnográfica en el casco histórico del municipio será la actividad principal de esta edición. Partirán de la construcción de una narración del territorio a partir de las memorias de la comunidad. Además, los participantes de este proyecto recibirán formación en el ámbito de la etnografía, escucha activa y sobre el valor del patrimonio cultural.
El trabajo final de cada video-entrevista será relacionado a un código QR plasmado en cada panel informativo que conformará la ruta para que el visitante pueda descargar con facilidad la información de cada uno de los lugares a los que acude.
González afirma que «esta ruta, junto con el material gráfico e informativo que irán recopilando durante los días del campo de trabajo, serán de gran utilidad e interés, no solo para los residentes, sino también para aquellos que nos visiten».
También llevarán a cabo un video-documental sobre la experiencia de autogestión del Teleclub, espacio que ha sido esencial para el desarrollo de distintas iniciativas de generaciones anteriores de jóvenes.
La Concejalía de Juventud asevera que este tipo de proyectos pretende contribuir a la conservación del patrimonio cultural e histórico del lugar y, a su vez, potencial la participación juvenil en programas que apuesten por la cultura, la historia, el medioambiente y que ayuden a promover el voluntariado local.