El Ayuntamiento de Los Silos ha confirmado la solicitud de paralización de la primera fase del proyecto de saneamiento y depuración de la Isla Baja hasta que se aclare la incertidumbre sobre la ubicación de la depuradora comarcal. El anuncio del consistorio se produce tras la celebración de la Junta de Gobierno local esta semana y días después de que el alcalde, Santiago Martín, adelantase la medida en el Cabildo de Tenerife.
Concretamente, la administración local ha acordado lo siguiente a propuesta del concejal de Medio Ambiente y Aguas, Ángel Hernández:
- Exigir la paralización de la obra denominada Sistema de Saneamiento y Depuración de la Isla Baja (Fase 1ª), debido a la incertidumbre de la nueva ubicación de la EDAR-Isla Baja.
- Considerar el sistema individualizado de EDAR por municipios un sistema efectivo hasta que la ubicación de la futura EDAR-Isla Baja no presente ningún problema.
- Estudiar la posibilidad de que la futura EDAR-Isla Baja se haga con la tecnología basada en la depuración natural, apostando por una comarca diferente que basa su desarrollo en la sostenibilidad, respeto al medio ambiente y que pueda albergar instalaciones de energías renovables que permitan reducir costes y garantizar su eficiencia.
En una nota de prensa difundida este miércoles, el Ayuntamiento silense recuerda que ya presentó en 2014 alegaciones al Plan Hidrológico Insular, donde se inclinaba por una depuración municipal aprovechando los sistemas existentes en cada municipio, ahorrando energía y «donde se proyecte la recogida para riego y el excedente sea vertido por zonas, produciendo un menor impacto que el vertido concentrado que se propone».
Esa propuesta, rechazada por el Consejo Insular de Aguas de Tenerife (CIATF), era «razonable para acabar con los problemas de contaminación o vertidos que se estaban produciendo, ya que los niveles de aguas residuales que tenemos en los núcleos afectados por este proyecto comarcal tienen una población entre 2000 o 3000 habitantes y entendemos que un sistema de depuración por municipio vendría a acabar con esta problemática de contaminación en nuestro litoral con escasa inversión comparándola con la inversión a una red de saneamiento comarcal», apuntan desde la Concejalía de Medio Ambiente.
El Ayuntamiento de Los Silos no ha autorizado la ejecución de la primera fase
La solicitud del Ayuntamiento de Buenavista para alejar la futura EDAR de Las Canteras, algo que se estudiará por parte del CIATF, condiciona la ejecución de la primera fase del proyecto, que preveé la conexión de la estación de Garachico con la de Los Silos. Así, el gobierno silense afirma que «este cambio de ubicación será totalmente diferente a lo acordado y, por lo tanto, las autorizaciones dadas por los diferentes municipios estaban condicionadas a la rapidez que se produciría el proyecto en su conjunto».
El temor de que las aguas fecales de Garachico se vertieran al mar por el emisario submarino de Los Silos (que pasaría a ser comarcal) mientras se proyecta y se ejecuta la EDAR de la Isla Baja se extendió rápidamente en la población del municipio a inicios de 2017, cuando los vecinos fueron conocedores del proyecto. En las reuniones del Ayuntamiento con los vecinos de La Caleta y el casco, el alcalde llegó incluso a especular con su dimisión si eso se producía. Este es el motivo por el cual el consistorio aún no ha autorizado la ejecución de la primera fase, que debía comenzar de manera inminente al estar licitados los trabajos.
Además, el Ayuntamiento ha pedido al CIATF «el proyecto técnico que nos asegure que las afecciones a los vecinos de La Caleta de Interián sean cero». De no ser así, señalan, piden la modificación del proyecto para que tanto la población de La Caleta como la de San Bernardo de Las Canteras «no se vea perjudicada ante esta situación».
El gobierno socialista de Los Silos, que tras conocer la solicitud de Buenavista para cambiar la depuradora comarcal mostró su preocupación, señala ahora que «entendería este cambio por un emplazamiento donde las medidas correctoras no aumenten los costes de explotación y mantenimiento, dándole mayor sostenibilidad al sistema». También expresan que la localización cerca de Las Canteras «puede generar una problemática medioambiental y el informe ambiental que se tendrá que emitir recogería unas medidas correctoras mediante una tecnología muy costosa para garantizar la no perturbación por olores y ruidos a la población, poniendo en riesgo la sostenibilidad económica del sistema».