El carácter épico de la pesca artesanal en la Isla Baja murmuraba en los recuerdos, testimonios y alegatos de los mayores. Ahora, esa épica ha sido rescatada a través del documental de Germán Pinelo y Sandra Ramos: ‘La comarca de Daute: pesca artesanal’.

El cortometraje documental fue presentado este viernes 31 de marzo en la Villa de Los Silos ante una sala Pérez Enríquez repleta. Es un trabajo que ha contado con el impulso del Ayuntamiento silense y que ha querido poner en valor una actividad económica señera en la comarca. También se ha contado con el apoyo de Acción local pesquera, Acción costera, la Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca del Gobierno de Canarias y el Fondo Europeo Marítimo de Pesca.

El mar, como si fuera un extenso campo en el que cultivar. Los pescadores profesionales, como auténticos titanes que con su esfuerzo remaban sin más motor que sus brazos. La épica, como hilo conductor que recorrió cómo era esa actividad hace muchas décadas y cómo es ahora. Estos tres elementos fueron los que marcaron el rumbo de un trabajo documental necesario para reflejar la necesidad y la añoranza de una actividad que sustentó a más de una veintena de familias en sus mejores momentos. 

Por otra parte, una base científica indiscutible, irrebatible, también épica por momentos. Gustavo González y Erika González, ambos silenses, testimoniaron por qué la Isla Baja es un lugar perfecto para realizar una pesca artesanal sostenible y cómo ha evolucionado esta actividad económica.

Pasado y presente se fundieron para demostrar que aún es posible dedicarse a este nicho de mercado profesional. Y además lo hicieron levantando la sensibilidad, recordando a antiguos pescadores, tirando del suceso del relevo generacional y demandando más apoyo institucional para que la pesca pueda ser una buena forma de vida.

Desde el punto de vista audiovisual, la épica estuvo presente desde el primer segundo. Un inicio grande, en el que poder meterte en las olas de la pantalla y tirar del nailon de Airam en Punta de Teno o, más adelante, ayudar a varar el barco de Pedro ‘el moro’ en el Puertito de Los Silos en 1989.

La comarca de Daute lleva varios años demostrando que es posible combinar y rescatar algunas de las actividades más características, las de siempre (agricultura, ganadería y pesca), con las posibilidades y el tractor que supone un ámbito como el audiovisual (solo por poner un ejemplo). Es una mixtura perfecta y una demostración épica, una vez más, de que en este trozo de tierra hay personas talentosas, que aman donde viven y que les gusta trabajar aquí. ¿Por qué no aprovecharlo aún más?

Que la épica sirva de excusa. Que la aventura sea un motivo. Que el juego sea el disfraz. Que el futuro sea el objetivo. Que todos y cada uno tomen un remo y remen siempre en la misma dirección. Esto es ‘La comarca de Daute: pesca artesanal’.