La colección de cuadernos de historia local ‘Clío garachiquense’ ha resucitado para seguir repasando la Historia de Garachico. Tras varios años en blanco, las páginas del proyecto editorial de Área Garachico vuelven a llenarse de tinta. 

En esta ocasión, el número 7 recoge, a modo de pregunta y respuesta; los 500 años de vida de la Villa y Puerto. Carlos Acosta, prolífico autor garachiquense, ha sido el encargado de ‘dar a luz’ un cuaderno eminentemente práctico y pedagógico. Este sábado 1 de abril se presentó este número y aunque Acosta no pudo estar por motivos de salud, una de las salas inferiores de la Casa de Piedra se quedó pequeña ante la asistencia de público. 

En el acto estuvieron presentes el alcalde de Garachico, Heriberto González; Cirilo Velázquez Ramos, historiador local y coordinador de la iniciativa editorial; Lorenzo Dorta, quien leyó una palabras de Carlos Acosta; y Daniel García Pulido, historiador y prologuista de este número de Clío garachiquense.

García Pulido entonó unas palabras en las que reconoció la labor de Carlos Acosta a lo largo de su trayectoria profesional y refrendó el bagaje histórico de un municipio que en sus orígenes destacó por su bahía y producción de malvasía.

También fue notable la intervención del coordinador editorial, Cirilo Velázquez, quien anunció que a lo largo de 2023 se espera que vean la luz algunos cuadernos más para recuperar el tiempo perdido en la pandemia. Si bien se ha publicado el número 7, en 2023 debería haberse publicado el número 9 ya que el ritmo de publicación era de uno por año.

Esta edición de ‘Garachico: 500 preguntas para 500 años de historia’ cuenta con 300 ejemplares. Una edición corta. No obstante, este número 7 puede ser uno de los cuadernos más importantes de esta colección ya que sintetiza de manera útil una relación historiográfica de lo publicado sobre Garachico. Partiendo de los inicios y llegando a la historia más contemporánea, dejando rastro de la Historia con mayúsculas y también de la intrahistoria. La que hacen las personas, con minúscula, pero no por eso menos ilustre.

Por otra parte, Velázquez destacó el contenido fotográfico de este número. «Hay un contenido fotográfico interesante. En algunas imágenes se realiza una comparativa entre el Garachico del pasado y el del presente», apuntó. Además, este último cuaderno de la colección está lleno de datos muy rigurosos que no solo se encuentran en las respuestas de cada una de las preguntas, sino también en los pies de foto de las fotos que destacaba el coordinador del proyecto editorial. 

El primer edil garachiquense, Heriberto González, quiso poner en valor la edición de cuadernos como este en la era digital actual. «Los libros tienen que seguir siendo importantes», dijo.

Clío garachiquense seguirá su andadura siempre y cuando los garachiquenses decidan tener otro mandatario que no vea el proyecto editorial con buenos ojos. No obstante, la historia continuará.