La Villa y Puerto de Garachico abrió este 1 de enero de 2023 con un concierto para el recuerdo. Tras dos años de parón, el Concierto de Año Nuevo de Tenerife volvió con su mejor versión. También volvió a tareas de presentación Carolina González, periodista de TVE en Canarias. Ella es una seña de identidad más de este concierto por su buen hacer y su elegancia.
La Big Band de Canarias, junto a Viktorija Pilatovic y Zule Guerra, amenizaron la primera tarde de 2023 con un concierto de gran nivel musical. La resaca del 31 de diciembre no fue una excusa para el público que como hormigas ocuparon cada uno de los asientos preparados en la glorieta de San Francisco desde las 17.00 horas. Aunque la octava edición de esta cita musical comenzaba a las 18.00 horas, a su puntual inicio ya no quedaban demasiadas sillas que ocupar. La organización dispuso 1.000 asientos que se quedaron cortos y el público tiró de las escalinatas franciscanas o de las escaleras libertinas.
El Concierto de Año Nuevo de Tenerife arrancó con dos temas en solitario de la Big Band de Canarias que calentó el ambiente para recibir en primera instancia a la lituana Viktorija Pilatovic. Su sofisticada voz, su delicadeza y su cercanía con el público desmintió el carácter frío de los centroeuropeos. Se le veía encantada y dispuesta a darlo todo. Abrió los brazos para envolver al público en la interpretación de cuatro temas, algunos de ellos compuestos por sí misma. ‘Question me’ es un tema «muy especial», en palabras de la solista, compositora y profesora de jazz. Pilatovic definió este concierto como «un gran regalo de la vida para comenzar un nuevo año».
Tras la caricia sonora de Viktorija Pilatovic el público se fue hasta el fulgor del Caribe. Ese viaje, tal y como se llama el último trabajo discográfico de la cubana Zule Guerra, fue casi literal: el 1 de enero gozó de una temperatura inusual para estar en pleno invierno. El resto lo hizo Guerra con un deslumbrante mono blanco y una piel del color del café que crearon un contraste perfecto para convertirse en el centro de más de 1.000 miradas.
Con tan solo tararear el inicio de su primer tema, ‘El viaje’, se pudo augurar una intervención idílica. Ese tarareo estuvo acompañado por la percusión de la Big Band de Canarias. Parecía que ya estaba todo hecho cuando el viento-metal y viento-madera fueron un colchón en el que pasar la resaca del 31, pero no. El público respondió con grandes ovaciones a todo el repertorio de la cubana que recordó a Benny Moré, al brasileño João Bosco o su sobrino Luis, aunque en este último caso no como músico sino como protagonista de una de sus composiciones.
Fue un inicio de año fácil, con candela musical y con el mayor alimento del espíritu: la cultura. La octava edición del Concierto de Año Nuevo de Tenerife ha sido premonitoria del gran año que comienza, dando el pistoletazo de salida al calendario cultural que desde el Ayuntamiento de Garachico se está preparando a través del proyecto Área Garachico. Un proyecto que este 2023 cumple 12 años en activo, con sus más y sus menos, pero que siempre ha sido una seña de identidad de la política del nacionalista Heriberto González.
