La Sala de lo Penal del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) ha desestimado el recurso de apelación presentado por un antiguo administrativo de la SAT Guancha Agrícola, ubicada en Garachico, contra una sentencia de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife que le condenaba a tres años y medio de cárcel por un delito de estafa agravada.

El condenado, que trabajó como auxiliar administrativo en la sociedad durante más de 14 años, era el encargado de tramitar las nóminas de los trabajadores y utilizaba un programa informático que solo él sabía manejar.

Así, con el ánimo de obtener un «beneficio ilícito», elaboraba dos listados distintos: uno donde incluía el importe de su nómina según lo recogido en su contrato y en el convenio del campo; y otro en el que alteraba el importe y era el que se recogía finalmente en el pen drive, que no era cotejado por el encargado de contabilidad.

Con esta forma de proceder, el hombre ocasionó un perjuicio a las arcas de la empresa de 364.715,15 euros desde enero de 2009 a mayo de 2017.

Aunque se da por hecho que el condenado realizaba funciones superiores a su categoría, no tenía derecho a percibir más retribuciones sin haber obtenido el permiso de la empresa o reclamándolo vía judicial.

La sentencia, hecha pública este miércoles 27, eleva el importe de la estafa por encima de los 50.000 euros, generando un perjuicio a la sociedad de 364.715,15 euros, que el condenado deberá abonar en concepto de indemnización.