El colectivo Vientos de Daute desarrollará un proyecto sobre la memoria histórica y diferentes actividades que comprendan los relatos de la represión franquista en la Isla Baja, a fin de «dar el digno homenaje que merecen los que lucharon por la democracia desde nuestra comarca».

Así ha informado este colectivo juvenil de Buenavista del Norte, fruto de un acto de la asociación celebrado a finales de febrero, en el que abordó el recuerdo de los ausentes, desaparecidos y reprimidos por el franquismo.

En concreto, fue el doctor en Antropología Social y Cultural de la UNED Jorge Moreno André quien explicó a los asistentes, junto al documentalista Dailo Barco, el poder inmaterial de la memoria con la materialidad de los objetos que, a lo largo de las décadas, permitieron a muchas personas mantener vivos a sus desaparecidos.

Vientos de Daute continúa, de esta forma con su iniciativa cultural en la Isla Baja, apostando por seguir desarrollando actividades de debate y divulgación de la historia canaria que fomente una participación abierta de los vecinos de la comarca.

El pasado fin de semana, la Casa de la Cultura de Buenavista del Norte acogió la proyección de la película Guarapo, de los hermanos Ríos. El reconocido filme, que narra el fenómeno de la emigración canaria de la postguerra, queda representado en la historia de Benito, un joven gomero que, enamorado de Amparo, sueña con dejar atrás su Canarias natal y olvidar todos los abusos caciquiles, la represión y la falta de libertad que ha traído el nuevo régimen.

Tras la la proyección, se abrió un debate en torno a la emigración clandestina de los isleños a Cuba y Venezuela, «destacando los motivos que conllevaron a nuestros antepasados a embarcarse en un difícil viaje por la búsqueda de trabajo y nuevas oportunidades para sus familias. Su implicación en el progreso de estos pueblos, ahora hermanados, es reconocida por todos».

Asimismo, análisis como los referidos a la colonialidad del poder y los modelos económicos de monocultivo implantados en las islas, se señalaron, junto a la histórica desigualdad de la propiedad de la tierra, como condiciones estructurales que pueden explicar los cíclicos movimientos migratorios de Canarias. Esto último, trayéndose a una perspectiva actual, hizo que los participantes del coloquio expresaran la necesidad de una acogida digna de los migrantes que llegan a nuestras costas en las últimas décadas, huyendo de conflictos bélicos y modelos económicos de carácter extractivo.