«Actividad que no se autoriza: la celebración de bailes nocturnos con participación de orquestas empleando sonido amplificado». Esta frase impidió el año pasado la celebración de las Fiestas de San Francisco de La Montañeta. La Comisión de 2016 había preparado unos actos por todo lo alto que finalmente no se llevaron a cabo por las limitaciones que impone el Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Natural de la Corona Forestal, notificadas por el Cabildo al Ayuntamiento de Garachico. La plaza de La Montañeta se enclava justo en los límites de este espacio protegido y, de momento, el consistorio no ha conseguido modificarlos para que el espacio de ocio quede fuera.
Pero la situación ha cambiado este año. El Área de Medio Ambiente del Cabildo ha permitido las Fiestas en honor a San Francisco y la Virgen del Rosario en este 2017 a través de un mínimo cambio en la autorización escrita. Sigue manteniendo la prohibición de celebrar actos con sonido amplificado pero añade lo siguiente: «excepto en aquellos casos en los que se requiera». Este matiz, bastante genérico, autoriza a la celebración de una verbena la noche de este sábado y de un festival infantil e domingo por la tarde.
La medida llega después de que el alcalde de Garachico, Heriberto González, se reuniese en otoño pasado con el Cabildo y el Gobierno de Canarias para buscar una solución. El concejal de Fiestas, Andrés Hernández, apunta además que el programa de este año también ha influido en la concesión de Medio Ambiente. «El año pasado se querían hacer dos bailes y ahora se ha llegado a un acuerdo para que al menos una noche se celebrase uno», admite.
Las Fiestas comienzan este viernes con parrandas en la denominada «noche sin amplificar», un guiño de humor puesto por la Comisión para aclarar que en este primer día de celebraciones no habrá música con un volumen elevado. A pesar del cambio de fecha (un fin de semana antes de lo acostumbrado), Andrés Hernández espera que el número de personas que acampen durante el fin de semana sea mayor al del año pasado. Eso sí, desde el Ayuntamiento se recuerda que esta tradición solo está permitida en terrenos privados y con previa autorización de sus propietarios.
El alcalde asistió en 2016 a una reunión bastante tensa con los vecinos de La Montañeta, donde no solo se quejaron por las Fiestas sino también por la propia situación del barrio. Ahora, el equipo de gobierno asegura que se está trabajando para «fomentar el desarrollo económico y turístico con un plan que aúne los diferentes atractivos con los que cuenta esta zona enfocada al turismo rural». Heriberto González busca convertir la antigua casas forestal en un albergue estratégico, ubicado junto al sendero que conecta el casco de Garachico con las medianías, pasando por La Montañera, y llegando hasta Arenas Negras y el Chinyero.